La playa de Las Salinas es un gran arenal de más de cuatro kilómetros de longitud. Es una zona protegida como Área Natural de Especial Interés. En ella encontramos zonas animadas con chiringuitos y beach clubs de moda, y otras áreas para disfrutar de la tranquilidad. Arena blanca y aguas totalmente transparentes convierten a la playa de Salinas en una de las favoritas de los bañistas y, por supuesto, de quienes recorren Ibiza en barco.
Localizada en el sur de la isla, Cala Jondal es una amplia bahía que, en lugar de arena, cuenta con cantos rodados en la mayor parte de su superficie. Cala Jondal ofrece uno de los paisajes naturales más bellos de la isla. La playa es una de las más populares de la isla, debido a la fama de uno de los beach clubs que aquí se ubican: Blue Marlin, donde, además de comer, cenar o tomar algo en un ambiente de lo más cosmopolita, podemos disfrutar de algunas de las fiestas más famosas de la isla. Es por eso que son muchos los barcos que fondean junto a la costa para disfrutar de sus ambientadas fiestas.
Sin duda, Cala Bassa es una de las playas más impresionantes de la isla. Está rodeada de un denso pinar ideal para quienes prefieren evitar la exposición directa al sol, refugiándose en su fresca sombra. Este increíble paisaje natural se fusiona con una completa oferta de servicios y restauración, pensada para el máximo disfrute de los bañistas. Fondear en Cala Bassa te permitirá bañarte en impresionantes piscinas naturales, así como disfrutar de una de las puestas de sol más espectaculares de Ibiza.
Formada por finas y nacaradas arenas y aguas de un intenso color turquesa, Cala Conta ofrece un paisaje idílico que la convierte en una de las playas preferidas de residentes y turistas. En sus aguas se suceden piscinas naturales de fondos arenosos y transparentes, ideales para disfrutar de un delicioso baño o practicar deportes acuáticos como el seabob o el paddle surf.
Si quieres vivir una experiencia realmente única en Ibiza, no olvides reservar una tarde de domingo para navegar hasta Benirrás y fondear entre la playa y el islote de Es Cap Bernat. Cuando cae el sol, centenares de personas se reúnen en la arena para tocar sus instrumentos de percusión. A la tamborrada se unen siempre espontáneos bailarines que se mueven al ritmo de la música para despedir al astro rey: un instante único que erizará tu piel y permanecerá para siempre en tu memoria.
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